Marzo '08 ya es historia

Increíble pero cierto.

Uno

Despertar

Viernes, 23 de junio de 2147, 10:02 a.m. reportaba la computadora de Vincent Werner. Podía escuchar la voz carente de humanidad de la máquina diciendole la hora o, si así lo deseaba, visualizar un reloj hexagonal de contornos y manecillas azul marino exactamente para el mismo propósito; lo importante era que con sólo desearlo tenía la información al instante. Consultaba de todo, desde las noticias de la mañana hasta las viejas formulas matemáticas que había estudíado hacía bastante tiempo.
Al parecer las pruebas habían sido un éxito. Su prototipo funcionaba como lo habia planeado, comprobado por experiencia propia. La primer computadora implantada totalmente dentro del cuerpo humano. Las ligeras punzadas producto de las incisiones en el lado derecho del craneo no parecian nada en comparación con todo el mundo que acababa de descubrir. Tanta información, cuando quisiera, donde quisiera; decadas adelante de las antiguas máquinas sensoriales que necesitaban molestos cascos y complejos controles para obtener insípidos estímulos de gusto, olfato o vista.
Aquello era diferente, se sintió satisfecho con los resultados y le emocionaba la idea de presentar en tres días los resultados al Consejo de Tecnología. Se acomodó en una silla y siguió jugando con su invención. Por primera vez tomaba conciencia de lo que podría significar el infinito.